El Patio, uno de los recintos más icónicos y relevantes para la música en español a lo largo del Siglo XX, se derrumbó el mediodía de este lunes 3 de junio de 2024. Este lugar histórico fue testigo de actuaciones legendarias de cantantes como José José y Juan Gabriel, consolidándose como un pilar cultural en la Ciudad de México.

Según diversos reportes, el colapso ocurrió después del mediodía durante los trabajos de demolición que ya se estaban llevando a cabo en el inmueble. Afortunadamente, las autoridades confirmaron que no hubo víctimas, aunque sí se atendió a dos personas que presentaron crisis nerviosa tras el incidente.

La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la Ciudad de México (@SGIRPC_CDMX) comunicó a través de su perfil en la red social X, antes Twitter: “Nos encontramos en Atenas 10, casi esquina con Bucareli, Juárez, Alcaldía Cuauhtémoc, donde se registró el colapso de un inmueble en el que se realizaban trabajos de demolición. Al momento, se atendió a dos personas por crisis nerviosa. No se tiene registro de personas afectadas”.

El Patio, inaugurado en 1938, fue un referente de la vida nocturna y la cultura musical en la capital mexicana. Durante décadas, el recinto albergó presentaciones de algunos de los más grandes artistas de la música en español, convirtiéndose en un espacio donde se escribieron innumerables historias y se vivieron momentos inolvidables. Su caída representa la desaparición de un testigo silencioso de la evolución musical y cultural de México.

Los vecinos y aficionados a la historia del espectáculo lamentan profundamente la pérdida de El Patio. Este lugar no solo fue un escenario para grandes voces, sino también un punto de encuentro para generaciones que disfrutaron de sus noches mágicas. La noticia del derrumbe ha generado una ola de nostalgia y recuerdos compartidos en redes sociales, donde muchos rememoran anécdotas y conciertos inolvidables vividos en el recinto.

A medida que la Ciudad de México continúa su proceso de modernización y reconfiguración urbana, la desaparición de lugares históricos como El Patio subraya la necesidad de preservar la memoria cultural y artística de la ciudad. Aunque el edificio ya no esté en pie, el legado de las noches de música y glamour que albergó permanecerá en el corazón de quienes tuvieron el privilegio de ser parte de su historia.