El Senado de la República aprobó hoy en lo general la reforma al Poder Judicial, que busca transformar la manera en que se eligen jueces, magistrados y ministros, estableciendo la elección por voto popular. Además, la reforma incluye la reducción de la Suprema Corte de Justicia de 11 a 9 integrantes y la desaparición del Consejo de la Judicatura, que será reemplazado por un nuevo órgano administrativo y un Tribunal de Disciplina Judicial.

Con 86 votos a favor y 41 en contra, Morena y sus aliados lograron la mayoría calificada para aprobar la reforma judicial en medio de tensiones y protestas. La votación se realizó uno a uno, dado que el sistema electrónico no estaba disponible. Esta reforma ha sido promovida por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador como parte de una serie de cambios que, según sus críticos, podrían debilitar la independencia del Poder Judicial al introducir un proceso de elección popular que, según algunos expertos, podría politizar el sistema judicial mexicano.

El senador Miguel Ángel Yunes Márquez votó a favor de la reforma, mientras que el emecista Daniel Barreda estuvo ausente, lo que facilitó el quórum para alcanzar la mayoría requerida. La propuesta también contempla un ajuste en la estructura del Poder Judicial, eliminando el Consejo de la Judicatura y creando un órgano encargado de la administración judicial, además de un Tribunal de Disciplina encargado de supervisar las acciones de jueces y magistrados.

Tras esta votación, la reforma será enviada a los congresos estatales, donde al menos 17 de los 32 deben ratificarla antes de que sea promulgada por el Ejecutivo. Esta iniciativa, aunque apoyada por el oficialismo, ha generado críticas de la oposición, que alerta sobre posibles riesgos para la independencia judicial en México. Los próximos meses serán clave para determinar si esta reforma transformará de manera significativa la justicia en el país.