La candidata presidencial Kamala Harris pronunció este martes su discurso final de campaña, donde reafirmó su compromiso de luchar por la unidad y contra la retórica divisoria del expresidente Donald Trump. En el simbólico escenario de Washington, D.C., donde ocurrió parte del ataque al Capitolio en 2021, Harris enfatizó que los esfuerzos de Trump por sembrar la división no representan al país. Mientras tanto, Trump realizó un mitin en Pensilvania, en el que prometió prosperidad para los latinos, luego de la controversia reciente sobre Puerto Rico.
Retórica de división y el simbolismo del Capitolio
Kamala Harris eligió el Ellipse, cerca del Capitolio, como el lugar para su discurso de cierre de campaña, subrayando el simbolismo del lugar donde se gestó parte del ataque del 6 de enero de 2021. Harris señaló que el ataque fue una amenaza a la democracia estadounidense, y aseguró que la división fomentada por Trump no es representativa de los verdaderos valores de Estados Unidos. Durante su discurso, la candidata expresó que “Donald Trump está cada vez más inestable y desenfrenado, y busca un poder sin control”, destacando los peligros de una posible segunda presidencia de Trump.
Por otro lado, el expresidente Donald Trump se encontró en el otro extremo de Pensilvania, donde celebró un mitin junto a la gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem. En este evento, Trump se enfocó en atacar a Harris y prometió prosperidad para las comunidades latinas, especialmente luego de los comentarios controvertidos hechos por uno de los oradores de su campaña sobre Puerto Rico. Trump también arremetió contra las políticas de inmigración y los costos altos de vida, asegurando que tiene planes para reducir los precios de energía mediante más perforaciones y otras medidas.
Un mensaje para dos Américas
El discurso de Kamala Harris buscó unificar al país y contrastar con el tono divisivo de Trump. Harris reiteró su compromiso de restaurar los derechos reproductivos, reducir los costos para las familias de clase media y ampliar el crédito fiscal por hijos, haciendo hincapié en que su campaña es para todos los estadounidenses, sin importar su afiliación política. En cambio, Trump se centró en atraer a sus bases conservadoras, prometiendo prosperidad económica y mayor seguridad. Estas promesas llegaron justo después de la polémica sobre Puerto Rico, donde Trump fue criticado por comentarios ofensivos hacia la isla.
Harris también proyectó videos de Trump durante su discurso, destacando sus afirmaciones sobre el uso del ejército contra ciudadanos estadounidenses y su retórica sobre “enemigos internos”. Este enfoque fue una forma de ilustrar los peligros que, según Harris, implicaría una posible reelección de Trump, y de motivar a los votantes a apoyar su candidatura para proteger los valores democráticos del país.Mientras Harris abogó por la unidad y el apoyo a todas las comunidades, Trump intentó conectar con los votantes latinos en Pensilvania, uno de los estados que podrían definir las elecciones. La estrategia de Trump también incluyó criticar la gestión de Harris y Biden en temas como la retirada de Afganistán y la inflación, buscando reforzar su imagen de líder fuerte y decidido. Sin embargo, la retórica de Trump ha sido vista por algunos como un intento de dividir más a la nación, mientras que Harris ha intentado proyectar un mensaje de esperanza y reconstrucción.
La batalla final por la presidencia
Con el día de las elecciones acercándose, los discursos finales de Kamala Harris y Donald Trump reflejan las visiones contrastantes que ambos candidatos tienen para el país. Mientras Harris se presenta como una líder que aboga por la unidad y la justicia social, Trump busca retomar el poder con promesas de prosperidad económica y seguridad. La campaña de Harris, enfocada en unir a los estadounidenses y desafiar la retórica de división, se encuentra en un momento crucial, en el que cada voto contará para definir el rumbo de la nación en los próximos años.