Justin Trudeau, quien ha sido primer ministro de Canadá desde el 4 de noviembre de 2015, anunció el lunes su intención de renunciar. Sin embargo, seguirá en el cargo hasta que el gobernante Partido Liberal elija un nuevo líder.

Trudeau, de 53 años, ha liderado Canadá durante nueve años, enfrentando tanto éxitos como desafíos. Su renuncia se produce en un momento de crecientes crisis internas y una disminución de su popularidad. Durante su mandato, Trudeau implementó políticas progresistas, incluyendo la legalización de la marihuana y la formación del primer gabinete con paridad de género en la historia de Canadá.

La decisión de Trudeau de renunciar se debe a la creciente presión política y a la necesidad de un nuevo liderazgo dentro del Partido Liberal. A pesar de sus logros, su imagen se ha deteriorado en los últimos años debido al aumento del costo de vida, la falta de viviendas asequibles y el empeoramiento de los servicios sociales. Además, ha sido criticado por su política migratoria y su manejo de la pandemia de COVID-19.

Trudeau es el primer hijo de un primer ministro canadiense que se convierte en primer ministro. Durante su carrera, ha trabajado como instructor de snowboard, portero de discoteca y consejero de campamento. Su mandato ha estado marcado por una serie de disculpas formales, incluyendo a los pueblos indígenas y a la comunidad LGBTQ2. A pesar de sus esfuerzos, el Parlamento canadiense ha estado paralizado, lo que ha llevado a Trudeau a aconsejar al Gobernador General suspender las actividades parlamentarias hasta marzo.

La renuncia de Justin Trudeau marca el fin de una era en la política canadiense. Su liderazgo ha dejado una huella significativa en el país, pero también ha enfrentado críticas y desafíos. La elección de un nuevo líder del Partido Liberal será crucial para determinar el futuro político de Canadá.

Trudeau ha anunciado que permanecerá en el cargo hasta que se elija un nuevo líder del Partido Liberal. La viceprimera ministra y ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, renunció recientemente, lo que incrementó las tensiones internas en el gobierno. La renuncia de Trudeau también tiene implicaciones para la relación de Canadá con Estados Unidos y México, especialmente en el contexto del T-MEC.